“Galileo” de Joseph Losey y “Galileo” de Liliana Cavani

Ficha técnica de “Galileo” de Joseph Losey

 

Formato: Película

Título original: Galileo

Año: 1974

Duración: 138 min.

País: Reino Unido

Dirección: Joseph Losey

Guion: Joseph Losey, Barbara Bray (Obra: Bertolt Brecht)

Música: Hanns Eisler

Fotografía: Michael Reed

Reparto:

Topol, Edward Fox, John Gielgud, Tom Conti, James Aubrey, Colin Blakely, Robert Bridges, Tom Chatto, Georgia Brown, Judy Parfitt, Michael Lonsdale, Michael Gough

Sinopsis

La acción transcurre en la Italia del siglo XVI, donde Galileo Galilei, científico, trabaja desentrañando los misterios de la naturaleza. Comienza la historia en la república de Venecia, donde malvivía con una aportación de la nobleza como científico de la república, al que complementaba dando clases particulares a familias pudientes. A él le llega un nuevo alumno que había estado en Holanda y conocía un nuevo aparato llamado telescopio. Mejorando el diseño, se apropia del invento y lo cede a los gobernantes de la república, vendiéndolo como artilugio que daría ventaja en las guerras. Eso le alivia las penalidades y además le permite utilizar dicho instrumento en el estudio del cielo, para poder encontrar pruebas de su hipótesis del modelo heliocéntrico, frente al imperante modelo geocéntrico. Encuentra dichas pruebas e intenta difundirlas. Sus teorías sobre el sistema solar le granjearon el rechazo de las poderosas autoridades eclesiásticas. En el transcurso de la película se narra las vicisitudes contra dichas autoridades, que le llevaron finalmente al arresto domiciliario por su obstinado cuestionamiento del principio de autoridad sobre el que se había basado durante siglos el conocimiento humano.

Comentarios

La película muestra un Galileo muy firme y combativo, además muy seguro de sí mismo. Creo que no es retrato realista del personaje ya que sabemos de sus grandes dudas que le llevaron tanto tiempo. Su familia y su infancia le hicieron estar muy ligado a la iglesia, con la que tuvo contactos toda su vida. Le sería tremendamente difícil ir en contra de su fe, por mucho que las pruebas le dijesen lo contrario, de hecho, terminó adjurando ante la Santa Inquisición del sistema heliocéntrico.

La parte positiva de la película son los diálogos y su profundidad. Se nota que es adaptación de una obra teatral “La Vida de Galileo” de unos de los mejores dramaturgos del siglo XX, Bertolt Brecht.

 

Ficha técnica de “Galileo” de Liliana Cavani

Formato: Película

Título original: Galileo

Año: 1968

Duración: 105 min.

País: Italia

Dirección: Liliana Cavani

Guion: Liliana Cavani, Tullio Pinelli

Música: Ennio Morricone

Fotografía: Alfio Contini

Reparto:

Cyril Cusack, Georgi Kaloyanchev, Nicolai Doicev, Miroslav Mindov, Georgi Cherkelov, Nevena Kokanova, Lou Castel

Sinopsis

La vida de Galileo, desde el comienzo de sus conflictos con la Iglesia Católica, su relación con Giordano Bruno y su abjuración final.

Comentarios

Nos muestra a un Galileo científico y filósofo preocupado no sólo por poder ser un hereje o no, sino por avanzar, saber y descubrir. Es maravillosa la escena en la que aplica las nuevas lentes que ha diseñado al telescopio y este, por fin, funciona.

Pero el universo de Galileo es muy amplio: la óptica, la anatomía -el planteamiento sobre la máquina humana y cómo funcionan sus diversas partes, la filosofía, las matemáticas, … La vida.

Con todo esto, Liliana Cavalli, aún saca metraje para presentar como punto discordante y discutidor a Giordano Bruno, más radical e impetuoso. Un Giordano que lucha contra viento y marea por “liberar la razón”, y que acaba como todos sabemos.

Un punto de discusión entre Galileo y Bruno será Copérnico:

Bruno: “Sé que vais a enseñar en Padua, ¿enseñaréis la nueva teoría?”

Galileo: “No tengo pruebas, no quiero pasar por un visionario ni por un hereje. Copérnico dijo sin pruebas que la tierra se movía y se rieron de él.”

La directora italiana presenta a un Galileo muy humano, con miedo a las reacciones que puedan producir sus afirmaciones. Presenta las dudas y la crisis de un hombre de ciencia y de fe que no termina de poder dar el paso hacia la verdad. Pero “la verdad no debe dar miedo”, le recuerda Bruno.

Lo sitúa también ante la inquisición:

– “¿Dónde está Dios en este Sistema, profesor?”, le pregunta un dominico

– “Dentro de nosotros.”

Cavani insiste mucho en una idea: la libertad es una condición inherente para que el saber pueda darse. Por ello es muy importante la escena final, el juicio contra Galileo y las reflexiones que la directora invita  hacer:

– la Iglesia Católica no le da la razón a Galileo porque sería darle la razón a la Iglesia Protestante

– la matemática es un arma del demonio usada contra los profetas

– si eres un hombre de ciencia no puedes ser un hombre de fe

– hay que elegir entre lo que te ofrecen tus ojos y tu reflexión o la palabra de Dios

Galileo es la historia de un hombre que se debate entre el amor a la ciencia y a la verdad y su fe. Que ama a Dios, pero no a la Iglesia que lo representa, a la que no entiende porque es una entidad que no ve más allá de su verdad y no intenta llegar a la Verdad.

Al finalizar el juicio, Galileo abjura de todos sus descubrimientos, de sus ideas, de su vida y, de lo que hoy sabemos, de la verdad

ABJURACIÓN DE GALILEO

“Yo, Galileo Galilei, hijo del difunto Vincenzo Galileo de Florencia, a los setenta años de mi edad, constituido personalmente en juicio y arrodillado ante vos, eminentísimos y reverendísimos cardenales, Inquisidores generales en toda la República Cristiana contra la herética maldad; teniendo ante mis ojos los sacrosantos Evangelios, los cuales toco con mis propias manos, juro que siempre he creído, creo ahora y con la ayuda de Dios, creeré en el futuro todo aquello que sostiene, predica y enseña la Santa Católica y Apostólica Iglesia. Pero como por este Santo Oficio, luego de haberme sido jurídicamente intimado con precepto del mismo que debía abandonar totalmente la falsa opinión de que el Sol es el centro del mundo y no se mueve y que la Tierra no es el centro del mundo y se mueve, y que no sostuviera, defendiera ni enseñara de ninguna manera, ni de viva voz ni por escrito, dicha falsa doctrina, y tras haberme notificado que dicha doctrina es contraria a la Sagrada Escritura, he escrito y dado a la estampa un libro en el cual trato la misma doctrina ya condenada y aporto razones con mucha eficacia en favor de ella, sin aportar ninguna solución, he sido juzgado como vehemente sospechoso de herejía, es decir, de haber sostenido y creído que el Sol es el centro del mundo e inmóvil, y que la Tierra no es el centro del mundo y se mueve.

Por tanto, queriendo yo quitar de la mente de Vuestras Eminencias y de todo fiel cristiano esa vehemente sospecha, justamente concebida sobre mí, con corazón sincero y fe no fingida abjuro y maldigo y detesto dichos errores y herejías, y en general cualquier otro error, herejía o secta contra a la Santa Iglesia; y juro que en el futuro no diré nunca más ni afirmaré de viva voz o por escrito cosas tales por las cuales se puede tener de mí semejante sospecha; y si conociera algún hereje o sospechoso de herejía lo denunciaré a este Santo Oficio, o al Inquisidor u Ordinario del lugar en que me encuentre.

Yo, Galileo Galilei, antedicho, he abjurado, jurado, prometido y me he obligado como queda dicho; y en fe de la verdad, con mi propia mano he firmado la presente cédula de abjuración y la he recitado palabra por palabra en Roma, en el convento de la Minerva, este día 22 de junio de 1633.

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