En mis seccionas puramente astronómicas de «Un Punto Azul» hablamos sobre lo muy grande: Planetas, estrellas, galaxias, cúmulos y hasta del universo al completo. Pero a veces lo pequeño también es importante.

En esta sección trataré de una rama de la física apasionante, aunque dificil y extraña, la cuántica. Para ello comentaré cuatro efectos cuánticos macroscópicos que influyen determinantemente en alguna faceta relacionada con la astronomía y la astrofísica.

Normalmente las propiedades y efectos de la física cuántica se quedan en los dominios de lo muy pequeño. Sólo a veces y en condiciones especiales, estas propiedades o efectos superan esta barrera y llegan a las dimensiones macroscópicas, que podemos ver y sentir. Y no sólo eso, sino que pueden provocar efectos decisivos en algunos fenómenos, que sin la implicación de la física cuántica parecerían incomprensibles.

Los cuatro efectos que describiré son, la superconductividad, la superfluidez, la presión de degeneración y la radiación de Hawking. Se pueden agrupar en dos parejas, superconductividad y superfluidez por un lado y presión de degeneración y radiación de Hawking por otro. Este emparejamiento viene dado por una propiedad que se hace extrema y que es la que causa precisamente que presenten propiedades extrañas.

En las dos primeras (superconductividad y superfluidez) es la temperatura y en la otra pareja (presión de degeneración y radiación de Hawking) es la presión.

Pero antes de entrar en estos fenómenos, tendremos que introducir algunos conceptos de física cuántica que son esenciales para comprender los fenómenos anteriormente descritos.

 

  1. Principios de la física cuántica 1
  2. Principios de la física cuántica 2
  3. Superconductividad
  4. Superfluidez
  5. Presión de degeneración
  6. Radiación de Hawking