Julio 09

La estrella Vega (en la constelación de Lira) junto con Deneb (en la constelación del Cisne) y Altair (en la constelación del Águila) forman el denominado Triángulo de Verano, que estará presidiendo en lo alto las largas noches veraniegas.

Las constelaciones que alcanzan su momento de mejor visibilidad son Scutum, Lyra, Sagittarius, Sagitta, Aquila y Vulpecula. Este mes lo dedicaremos a la constelación de Sagittarius, una de las constelaciones zodiacales. Como es muy difícil para los astrónomos de hoy ver en este asterismo la figura mitológica de sagitario, hemos descubierto otra que se adapta más a estos tiempos y que es más fácilmente reconocible. Sagitario tiene un grupo de estrellas muy reconocible denominado  la Tetera, con una tapa acabada en punta (Lambda) y un enorme pico (Gamma, Epsilon y Delta). El mango de la tetera también se denomina el Cucharón de leche. Es una constelación tremendamente rica en estrellas y objetos de cielo profundo, esto es debido a que el centro de nuestra galaxia se encuentra precisamente en esta dirección. En esta constelación hay más objetos catalogados por Messier que en cualquier otra constelación, 15 objetos en total. Y aunque en nuestro lugar de observación habitual la visibilidad de Sagitario no es la óptima, paso a describir los objetos más interesantes que se pueden ver en esta interesante constelación:

M8: Conocida comúnmente como la Nebulosa de la Laguna. Es una nebulosa difusa que se encuentra próxima a Kaus Borealis y es visible con unos prismáticos. Tiene una magnitud de 5,2. Uno de los rasgos notables de la Nebulosa de la Laguna es la presencia de nebulosas oscuras conocidas como «glóbulos» (Burnham), que son nubes de protoestrellas colapsando con diámetros de unas 10.000 Unidades Astronómicas.
M17: Conocida por la Nebulosa Omega. Es una región de formación estelar y brilla por emisión excitada, causada por la radiación de alta energía de estrellas jóvenes.  Se puede localizar buscando primero Scutum y es visible con prismáticos.
M18: Es un cúmulo abierto de magnitud 7,5. Como las estrellas más calientes en M18 son de tipo espectral B3, este cúmulo es realmente joven; su edad se estima en 32 millones de años. Este cúmulo contiene estrellas azul brillante así como amarillo brillante o naranja.
M20: Se trata de una nebulosa difusa, conocida como la Nebulosa Trífida. Recibe este nombre porque tiene tres lóbulos gaseosos separados por líneas oscuras de polvo. Es, a la vez, una nebulosa de emisión y de reflexión. En su centro hay cúmulos de estrella jóvenes. La roja nebulosa de emisión con su joven cúmulo estelar cerca de su centro, está rodeada por una nebulosa azul de reflexión. En el cielo, la Nebulosa Trífida M20 se sitúa aproximadamente a 2 grados al noroeste de la más grande Nebulosa de la Laguna M8, de modo que ambas son un buen blanco para las fotografías de gran angular.
M21: Es un cúmulo abierto de 6,5 de magnitud visual. M21 es un cúmulo que muestra una fuerte concentración hacia su centro. La mayoría de sus estrellas más brillantes son gigantes espectrales del tipo B, de lo que se deduce que es un cúmulo joven.
M22: Es un objeto digno de mención. A 10.400 años luz, es uno de los cúmulos globulares más cercanos. A esta distancia, sus 32′ de diámetro angular, ligeramente más largo que el de la Luna llena, corresponden con un diámetro lineal de unos 97 años luz; visualmente, está cerca de los 17′. Es visible sin telescopio para observadores en una latitud no muy al norte. Su magnitud es de 5,1.
M23: El cúmulo abierto M23 es otra visión gloriosa para los telescopios pequeños y los binoculares en la Vía Láctea de verano. Es uno de los descubrimientos auténticos de Charles Messier; quien descubrió este cúmulo el 20 de Junio de 1764. Su magnitud es de 6,9.
M24: El objeto número 24 de Messier no es un «verdadero» objeto del cielo profundo, sino una inmensa nube estelar en la Vía Láctea, un seudo cúmulo de estrellas disperso por cientos de años luz a través de la línea de visión, percibidas a través de aberturas en el polvo interestelar. Forman una porción de un brazo espiral de nuestra galaxia y tiene una magnitud de 4,6. Contiene en su interior diversos cúmulos propiamente dichos.
M25: Es un cúmulo abierto de magnitud 6,5. Dos gigantes de tipo espectral M y dos de tipo G pueden ser encontradas en este cúmulo, donde las gigantes de tipo G parecen ser miembros reales (las M no). Además contiene a la estrella variable U Sagittarii de tipo Delta Cephei, que tiene un periodo de 6,74 días, un periodo típico para estas estrellas variables «en nuestro barrio».
M28: Es un cúmulo globular de magnitud 6,8. A unos 18.000 a 19.000 años luz de distancia, con su diámetro lineal de 60 años luz parece considerablemente más pequeño y más condensado que su vecino más llamativo, M22. Se necesitan instrumentos grandes para resolver sus estrellas; fue William Herschel el primero en describirlo como una «nube de estrellas».
M54: Es un cúmulo globular de magnitud 7,6. Este cúmulo globular es brillante pero pequeño por lo que puede ser pasado por alto con binoculares pequeños o telescopios de búsqueda (es decir confundido con una estrella). Por su gran distancia, este cúmulo globular es difícil de resolver. Binoculares y telescopios pequeños lo muestran como un objeto redondo y nebuloso de bordes borrosos. Uno de 10 cm (4 pulgadas) muestra una textura abigarrada, bajo buenas condiciones con nudos de apariencia estelar.
M55: Es un cúmulo globular de magnitud 6,3. M55 es un cúmulo globular bastante grande (de unos 19′, más o menos dos tercios del diámetro aparente de la luna) pero tiene una apariencia tan holgada que el presente autor tuvo una impresión del cúmulo incluso con unos binoculares de 7×50, cuando la mayoría parecen nebulosas, este aparece muy granuloso.
M69: Es un cúmulo globular de magnitud 7,6. M69, al igual que su vecino M70, es uno de los cúmulos globulares del catálogo Messier más pequeños y de luminosidad más débil. Sólo es visible en una noche oscura y con unos binoculares de 7×50 o 10×50, siempre que el lugar de observación no esté muy al norte.
M70: Es un cúmulo globular de magnitud 7,9. Aunque parece tan grande y brillante como su vecino M69, el cúmulo globular de estrellas M70 es en realidad ligeramente más luminoso y un poco mayor, y está casi a la misma distancia (29.300 años luz). Ambos se hallan bastante cerca del centro galáctico, por lo que ambos están sujetos a fuertes fuerzas de marea. M70 está a casi la misma declinación sureña, por lo que resulta un objeto difícil desde París, donde Messier lo observó.
M75: Es un cúmulo globular de magnitud 8,5. Es uno de los globulares más compactos y concentrados, clasificado como de clase I. Debido a esto y a su distancia, se requieren grandes telescopios para resolverlo en estrellas. Su diámetro angular de 6,6′ corresponde a una extensión lineal de bastante más de 130 años luz, y es de gran luminosidad, tal vez unas 180.000 veces la del Sol.

LOS PLANETAS

Mercurio irá perdiendo altura según vaya avanzando el mes, pasando, a mediados, de verse antes de los amaneceres a verse antes de los anocheceres en la segunda quincena. Será muy difícil su observación dada su cercanía al Sol.

Venus irá ganando altura y se observará antes de los amaneceres, llegándose a poder observar casi tres horas y media antes del amanecer al final del mes.

Marte irá ganando altura y se observará antes de los amaneceres, llegándose a poder observar casi cuatro horas antes del amanecer al final del mes.

Júpiter dominará los cielos, pudiéndose observar prácticamente durante casi toda la noche. Se aproxima a su momento de oposición, que será en Agosto.

Saturno solo se podrá observar tres horas después del anochecer, acortando su tiempo de observación según vaya avanzando el mes.